Descripción
CELTAS
El nombre «Celta» proviene del vocablo griego «Keltoi», cuyo significado es «bárbaro» o extranjero, y se refería a los pueblos extranjeros que los griegos conocían al norte de Macedonia, otra teoria asegura que la palabra Celta significa, originalmente, «héroe». Se presume que existieron desde el año 2000 a.C. (fin de la Edad de Bronce) y alcanzaron el culmen de su cultura en la Edad del Hierro. Divididos en dos grupos, los primeros abarcaban Europa, desde el río Danubio, vivían de la agricultura y de la artesanía y eran el grupo más pacífico de los dos; el otro grupo, los celtas guerreros como los conocemos hoy, que venían de Los Balcanes y disponían de un buen ejército, con el que conquistaron grandes partes de Europa.
Eran conocidos por su caballerosidad, su orgullo en la lucha y su ánimo, pero también por su sentido por la música, la poesía y la filosofía. Iban siempre provistos de una hoz de oro y de muérdago recién cogido. El vino era la bebida de las clases más altas pero el pueblo tomaba corma, que era cerveza de trigo mezclada con miel, muy utilizada en los banquetes, los cuales eran muy frecuentes en tiempos de paz. Construían sus fortificaciones en las cumbres y acuñaron su propia moneda.
Despues de la Edad del Bronce, el hierro sustituyo al otro material en la fabricación de elementos como grandes espadas, puntas de lanzas, hachas, agujas, recipientes, escudos alargados, cuchillos y puñales.
Los Druidas, el estrato de mayor influencia y poder entre los celtas, eran los sacerdotes, que solían hacer sus ceremonias bajo la protección de los bosques, sabían leer y escribir griego y latín (como los antiguos sacerdotes egipcios), sin embargo optaron dejar por vía oral, en hermosos versos, la crónica de la existencia de su pueblo.
la mujer tenia una buena posición, como en todos los pueblos guerreros, era la que hacia el trabajo en casa y realiza las tareas propias de la artesanía y la agricultura, pero no era considerada inferior al hombre, podia por ejemplo elegir a sus amantes y la virginidad no jugaba un papel tan importante como en la cultura cristiana. Cada año, en primavera se celebraba una fiesta donde los jóvenes se encontraban para unirse. La mujer que era madre, era mirada como una diosa protectora.
La libertad individual era un rasgo predominante, lo que quiere decir que casi no existía la esclavitud. El jefe de una tribu tenía que mostrarse digno de guiar a su pueblo y no había una dinastía fija. Sus enemigos les llamaban los «Hijos de los vientos». Preferían la muerte a la derrota.